viernes, 2 de octubre de 2009

Regidora

A propósito de la entrevista con Itziar González que ayer publicaba El País, me gustaría preguntar, antes de nada, si alguien conoce algún documento donde se concrete el famoso modelo al que se refiere la regidora. Un modelo que, según sus palabras, no falla en sí mismo, pero sí en sus efectos:
Los problemas que tenemos no son culpa del modelo, sino que se derivan de su éxito (...) No, no falla el modelo, pero quizá no se había previsto cómo controlar a aquellos que se aprovecharían del éxito"
Nótese, por cierto, el uso del condicional en la última frase, como si ella misma estuviera tan poco convencida de sus palabras que tuviera que al final cogerlas con pinzas:
“… aquellos que se APROVECHARÍAN del éxito
Lo pregunto porque, cuando he leído lo del modelo, he ido a la tribuna de Jordi Hereu publicada unos días antes en el mismo diario (El País, 17 de setiembre de 2009) pensando encontrar allí al menos una pincelada de ese modelo, a ver si consigo aclararme de una vez. Pero lo más que allí encontré son algunas medidas que por si solas no llegan a constituir modelo alguno.

Lo pregunto también porque tengo la sensación de que “modelo” es una de esas palabras comodín de los políticos, uno de esos términos con que tratan de esconder el vacío, de manera que es muy fácil llamar así a cualquier cosa, por ejemplo a una serie de medidas no suficientemente analizadas, inconexas y a veces contradictorias, como por ejemplo la de otorgar licencias a diestro y siniestro para abrir tiendas de souvenirs y luego tratar de hacerlas desaparecer apresuradamente.

Así, con esa falta de concreción se arreglan muy bien, porque cuando conviene, pueden decir que tienen un “modelo” -a veces también le llaman proyecto- y se van, por ejemplo, a presentarlo a la Expo de Shangai –que, por cierto, tiene como lema “Mejor ciudad, mejor vida”—y a gastarse 3 millones de euros sin que se les caiga la cara de vergüenza.

Pero lo cierto es que se necesita una cara muy dura para perpetrar tamaña frase con los términos “problema” “modelo” y “éxito”. Me imagino a la regidora y a sus asesores preparando la entrevista y tal vez sonriendo satisfechos al dar con semejante “idea fuerza”. Tal vez, al exponerla por primera vez, haya esbozado una sonrisita satisfecha o tal vez haya fruncido el ceño para aparentar seriedad y aplomo.

Pero yo, al final, no acabo de entenderlo muy bien... El éxito del modelo ¿es un problema?. ¿El problema del modelo es un éxito? ¿El éxito es un problema del modelo? ¿Qué c... de modelo es ese?

¿O habrá querido decir “camelo” ?
No, no falla el camelo, pero quizá no se había previsto cómo controlar a aquellos que se aprovecharían del éxito
Eso es. Para empezar a entendernos, tal vez estaría bien que nos contaras quiénes son los que se están aprovechado del “éxito” y a quiénes sólo les tocan los problemas. ¿Tanto te cuesta reconocerlo?

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